Informe sobre el uso riesgoso de ChatGPT y Grok
Los avances en inteligencia artificial han traído consigo oportunidades increíbles para mejorar nuestra seguridad digital. Sin embargo, también han amplificado las tácticas de los ciberdelincuentes. Un informe de Huntress destaca una nueva y preocupante forma en que estos delincuentes utilizan chatbots de inteligencia artificial, como ChatGPT y Grok, para propagar malware de manera discreta y efectiva.
Este estilo de ataque se basa en la confianza que muchos usuarios tienen en aplicaciones y herramientas conocidas, como Google. Claro, no hace falta ser un experto para recordar cuántas veces buscaste respuestas a preguntas cotidianas. Según el informe, los atacantes logran insertar comandos maliciosos disfrazados en búsquedas comunes, poniendo en riesgo a miles de usuarios sin que estos se den cuenta.
Estrategias de ciberdelincuencia en resultados de Google
¿Cómo funciona esta maniobra? Primero, los hackers le piden a un chatbot información sobre algo común, como “¿Cómo instalo Office?”. Luego, invierten en publicidad para que sus respuestas maliciosas aparezcan entre los primeros resultados de búsqueda. Así, cuando un usuario ingresa su consulta, se topa con instrucciones que parecen legítimas pero que realmente abren la puerta a la instalación de software dañino.
Este tipo de ataques se ha documentado en plataformas como ChatGPT y Grok, y apuntan especialmente a usuarios de computadoras Apple.
Riesgos de copiar comandos sin verificar
Uno de los aspectos más alarmantes de esta técnica es que no sigue el patrón tradicional de malware. No es necesario descargar archivos, instalar programas o hacer clic en enlaces sospechosos. El ataque se basa en la confianza, ya que el usuario suele copiar y pegar comandos sugeridos sin cuestionar su origen. Este simple acto puede ofrecer acceso completo a su dispositivo.
Consejos para protegerse del malware
Con la amenaza constante de ataques como estos, es crucial tomar precauciones. Los expertos en ciberseguridad recomiendan verificar siempre la fuente de la información y ser escéptico ante comandos técnicos que carecen de contexto. También es mejor evitar pegar instrucciones directamente en el navegador o en la terminal del sistema sin entender su función.
Además, mantener el software de seguridad actualizado y tener una actitud crítica hacia ciertas respuestas que parecen demasiado sencillas son pasos clave para proteger tu información personal y evitar infecciones.